Yo os aconsejaría que hagáis la mitad de la receta, ya que con ésta salen muchas.
INGREDIENTES:
-6 huevos
-1 y 1/2 kg. de harina
-1/2 kg. de azúcar
-1 copita de anís
-5 cucharadas soperas de esencia de vainilla
-Ralladura y zumo de 2 limones
-2 sobres de levadura
-1/2 cucharadita de las de moka de bicarbonato
-Azúcar vainillado para poner por encima
-1/2 litro de aceite de girasol (o si es de oliva, de 0,4)
ELABORACIÓN:
Batimos las claras casi a punto de nievo e incorporamos las yemas y el azúcar batimos bien. Ponemos la ralladura y el zumo de los 2 limones, la esencia de vainilla. A continuación agregamos el anís y el aceite. Mezclamos bien e incorporamos la harina con la levadura y el bicarbonato. Esta masa se trabaja lo imprescindible.
La ponemos en un bol, la cubrimos con film transparente y la dejamos en la nevera al menos media hora. Ponemos harina en una mesa y con un rodillo extendemos un trozo de la masa. Con un cortapastas (o si no tenemos, con un vaso) cortamos las galletas y las ponemos en una bandeja de horno sobre papel de hornear.
Hay que cogerlas con cuidado para que no se deformen, y echamos por encima de cada una un poquito de azúcar vainillado. Las metemos al horno, previamente calentado a 170º con ventilador arriba y abajo durante 12 o 15 min. Las sacamos cuando estén doraditas, y las ponemos a enfriar sobre una rejilla, y metemos la siguiente bandeja.
Estas galletas se pueden bañar con chocolate fundido, dejándolas secar después.
Aquí os dejo las fotos para que veáis el proceso y el resultado. Yo hice diferentes formas. Espero que os gusten.
Nota: Aunque parezcan pastas, no lo son. Ya las haremos en otro momento.
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